El Manifiesto comunista para el Tercer Milenio
 
 

No para amigos de acertijos. Solamente para ser leído. Por esta razón, excepcionalmente algo largo. Pero por eso puede prolongar la vida. Algo incruento también.
De uso interno/externo

¡FUERA CON LA CLASE MEDICA!
¡LA META: LA SOCIEDAD SIN CLASES!
¡ADELANTE LA CLASE DE PACIENTES!
 

¿Todos afuera el 1o de Mayo verde?

1)
La salud es una quimera biológico-nazista, constató ya en el año 1970 el SPK, otros no hasta hoy (“desconcertante“, “secundario“, „desviante“, hostil a las masas“, etc., conocemos esta habladuría). Entretanto uno puede leerlo también en la prensa: Como un hecho, como algo que está hecho, ¿Y hecho por quién? De eso ya no hay duda alguna, es decir, “el arte médico“: “En la era de recogida de datos genéticos ya no habrá hombres sanos. Cada uno podrá deducir de sus datos genéticos que sus genes son defectuosos y su pronóstico de salud está oscurecido por defectos hereditarios específicos. Cuando los diagnósticos genéticos han juzgado sobre los riesgos de enfermedad de un hombre, los terapeutas genéticos le ofrecen sus servicios para huir de su destino.“ Quien propaga hoy en día sea solamente la palabra salud, tiene que tener cuidado de no caer en manos del psiquiatra por sufrir alucinaciones.

La salud, lo más santo de lo santo, el valor y el patrón supremos que, hasta la fecha, se sobrentienden y parecen ser inquebrantables, el portador de la esperanza y la ilusión de los grandes y pequeños en todas la sociedades precedentes, ha sido hecha reventar únicamente y por vez primera por el COLECTIVO SOCIALISTA DE PACIENTES, EL FRENTE DE PACIENTES [SPK/PF(H)] (eso dicen otros acerca de nosotros). Ninguno de los 500 del SPK quería „salud“, ninguno de ellos ha contado ni siquiera con ella desde entonces. En pocas palabras: el SPK como un hecho sólido, evidente, inabarcable e irrevocable, se ha encargado de que las pompas de jabón „salud“ y „curación“ hayan reventado y queden reventadas para siempre. El desahucio, la eliminación de seres humanos, de los enfermos, de los pacientes, llegaba demasiado tarde desde el principio, porque la pompa de jabón „salud“ había reventado en público, como queda dicho, desde los principios (1965). Este hecho tampoco puede ser cambiado por la aseveración, expresada posteriormente del lado adversario en el „Archivo de Ginebra para Procesos Políticos“, y eso con una intención hostil, de que en el SPK había curaciones milagrosas. En el SPK nadie ha tomado la enfermedad de los demás por la enfermedad de los demás. Quien toma la enfermedad por la enfermedad de los demás, hace que ésta se transforme en una enfermedad médica y ésta tiene repercusiones, también sobre él mismo. Cada uno, mujer, hombre, niño, en el SPK, había comprendido en la práctica lo que significa esto, sin importar qué grado de „debilidad mental“, „diabetes“, „drogadicción“, „parálisis“, „tartamudez“, „gafas de Valium“, la Medicina les había certificado antes.

Los médicos que desde siempre han establecido su norma y a sí mismos como norma, la han convertido hoy en algo automático, la ejecutan entretanto como autómatas, como ordenadores. Los demás colaboran ejecutándola, esa norma, automáticamente en sus programas de ordenador. De este modo, esta norma médica, ya desde hace mucho tiempo, ha sacado cabeza a todos, y está amenazando con ahogar a todos. Desde 1977 nosotros hemos llamado a esta norma Iatrarquía. Es una práctica sin autor, sin responsables. Es la nueva Burguesía, la Normesía. A esta Normesía había que atacarla, hay que atacarla y habrá que atacarla. La antigua Burguesía ha pasado. ¿Quién es responsable? Cada uno que no la combata, y por consiguiente la apoye, está en el rango de un médico, justamente como si esta persona misma fuera un médico in actu. Pero de este modo no tiene más valor que sus células y órganos. Sin embargo es productor de plusvalía, es iacapista (iatro-capitalista), eso sí. Sí, tampoco las clases son lo que eran en sus días. ¿Pero han desaparecido? Más de uno quedará pasmado: No ayudan ni evasivas ni chácharas de especialistas o no especialistas al estilo de: en esto no soy competente, no soy experto, acerca de eso tienen que decidir ellos.

La línea divisoria se establece entre la clase de los pacientes y la clase de los médicos. La característica distintiva se llama: Frente de Pacientes por un lado. El lado contrario ya empieza ahí donde están las huestes y tolerantes de la clase médica. Ya tuvimos a éstos una vez (Cámara de Desnazificación contra las así llamadas huestes, simples socios del Partido Nazi). Sí, la proximidad hacia los medios de producción determina hoy como antes al antagonismo de clases. Hoy aún totalmente de distinta manera. Las fuerzas productivas ya no son el proletariado industrial ordinario, sino los criadores del „hombre nuevo“, de la mercancía nueva de fábrica que es el hombre. La tierra con sus materias primas ya no es el medio de producción. El medio de producción nuevo es el resto, mucho más amplio, con sus órganos corporales (100 mil millones de células cerebrales cada uno, la materia prima más valiosa). Y las relaciones de producción son las normas médicas, almacenadas en los programas de ordenador. ¡Además hay algún que otro sector primario, secundario y terciario que ya no cabe en los patrones antiguos que son la distribución, la consunción, etc., mis Señores de la Asociación de Sociólogos!

¡La enfermedad en las manos del pueblo! ¡Clase de pacientes!
¡Los laboratorios genéticos y todo lo que esté relacionado con ellos, al vertedero, pero sin reciclaje!
¡Los chapuceros de laboratorios genéticos, ¡y ahí no hay otros!, como basureros en causa propia, pero en todo caso bajo control permanente de los pacientes!
¡Para empezar eso ya es algo!

La enfermedad es lo que hoy en día todos tienen en común (das allen gemeine), la enfermedad es lo general (das Allgemeine) y en este sentido es la norma, y está formulada solamente por los médicos de otra manera. Pero si de todos modos la enfermedad es lo general, ¿por qué no empezar con ella al instante y darle toda prioridad?.
 

2)
El Iatrocapitalismo, los médicos, lo posibilitan: el comunismo es realizado por los médicos.
¿Cómo es esto? El Comunismo ha postulado ya desde siempre, como ya antiguamente el filósofo griego Protágoras, que el hombre no sólo es la medida de todas las cosas, sino que es parte por parte lo más valioso y precioso entre el Cielo y la Tierra, (véase también la Constitución alemana (análogo la Constitución Española): „la dignidad del hombre es inviolable“ - ¡ja, ja!). Desde el punto de vista médico, el hombre se ha convertido mientras tanto en lo más valioso en cada una de sus partes. Cada célula corporal humana, cultivada y criada en el laboratorio genético, transformada en mercancía, se amortiza con creces en forma de montantes de miles de millones. La economía del libre mercado lo posibilita, incluso lo fuerza, por la fabricación, por la producción en masa, el boom; con el paro en masa, es previsible que no haya problemas de ninguna clase. Cada una de las células corporales es infinitamente valiosa, y no se debe despilfarrar porque se puede clonar con ella otro „hombre“, como copia o como almacén vivo de recambios.

Capitalismo:
Es el Capitalismo más moderno de la Edad de Piedra. Del Capitalismo antiguo de la Edad de Piedra estamos, gracias a la clase médica, curados de una vez para siempre. Exactamente por éste moderno. En el antiguo Capitalismo de la Edad de Piedra todavía las cosas eran valiosas, pero el hombre no valía un pito. Era cambiable, y por eso reemplazable en todo momento: „Si muere un hombre, eso no es la ruina; pero si muere el ganado, es toda una tragedia“ (Menschensterben, kein Verderben, Viehverrecken, das bringt Schrecken). Así como se quemaba antiguamente carbón en las locomotoras de vapor para que funcionara el tren, así en el antiguo Capitalismo de la Edad de Piedra se consumió a toda la gente, a todos menos a los fogoneros (¡!) y éstos a veces a fin de cuentas también, para que se acumulara capital. No, no ganar dinero, sino el truco de hacer del dinero más dinero, y a saber, sin escrúpulos, pasando por encima de los cadáveres, eso es el Capital, quiere decir: amontonar el capital, acumulación de capital. En una palabra: Capitalismo. El truco se ha hecho sistema, a la larga y por costumbre ya nadie se da cuenta de esto. Pero todos lo sienten, todos están enfermos a fondo, y por los médicos están convertidos en enfermos de muerte.

Así lo practicaron ya hace milenios los sacerdotes médicos: calificaron como dioses a algunas cosas, y para eso sacrificaron hombres. Los hombres no valían nada, sirvieron a lo sumo de víctimas de ofrenda matados para estos dioses (Schlacht-Opfer-Gaben für diese Götter). Así cada época tenía sus trucos particulares, su clase específica de estafadores. Eso salía en ocasiones bastante mal. Pero luego esto era cada vez un avance monstruo, ¡es verdad!.

¿Cumplen ahora los médicos los objetivos de los marxistas, es decir, que ya no se consideran valiosas las cosas, sino únicamente „el hombre“?

No. Se potencia la alienación. El objeto valioso ya no es el oro o un diamante, sino el „hombre biomasa“ es la mina de diamantes y de oro de hoy. De cada célula corporal se puede clonar un „hombre nuevo“ completo. Lo que se llama hombre se convierte todavía más en una cosa, en un objeto, en la cosa más valiosa para el clonaje y/o como almacén de recambios para los que pueden permitirse comprar órganos corporales ajenos. De modo distinto eso es un reciclaje de material de valor. Libertad: cada uno puede comprar y vender lo que quiera. Consecuencia y causa aún en el capitalismo más moderno de la Edad de Piedra: el hombre es desmontable (esto es harto sabido).

La medida monetaria se llamaba antaño reservas de oro, después el total de las unidades de trabajo, medidas en tiempo. En el futuro la medida monetaria se llamará gen, lisa y llanamente gen. Miles de millones tú también los llamas propios. Guarda lo que tienes para que nadie te robe tu corona. (Biblia Políglota, AT: Halte, was Du hast, auf daß Dir niemand Deine Krone raube.) ¡Caramba!

Ya en el año 1965 (¡!): Trajeron a altas horas de la noche a un motociclista joven al Equipo Quirúrgico con pasta en lugar de los sesos. Los estudiantes de Medicina en la clínica se asombraban: ni un médico movió un dedo. Nada se hizo. Está claro que el joven se moriría si no se hacía nada. Ni un médico intervino. Pero solamente un momento después, todo fue demasiado tarde, una nube blanca, todo estaba lleno de batas blancas lavadas, gran animación y alegre excitación, todos con su uniforme: extracción de órganos.

„Se apaga“ a la gente antes de tiempo, antes de que hayan muerto „de verdad“, se desmonta lo „utilizable“ para vender órganos a otros por mucho dinero. „¿Superpoblación?“. Los unos están para darles la muerte, a los otros, para que ellos sigan viviendo, se les equipa de los órganos ajenos, alienados, órganos alienados de la especie humana. Para que uno siga viviendo, otro debe morir. Así los unos se cuidan de los otros. Es decir que no se trata del número total de los vivientes con respecto a la „superpoblación“. No se trata de que deba haber generalmente menos gente sobre la Tierra. Si no, los médicos estarían contentos por cada uno que se muriera de „un fallo de un órgano“. ¿Por qué los trasplantes de órganos? Eso es una cuestión de la pertenencia a una clase y ésta la definen los médicos: ¿Pertenece uno a los que están destinados a morir o a los demás, los „electos“ para los trasplantes de órganos? Los médicos procuran el lucro (... den Profit) en ambos casos.

Y en fin: ¿Superpoblación?. Hay solamente médicos y los demás desde su punto de vista no son nada más que „human vegetable“ (verduras).

Médicos sin Fronteras, ¡es verdad!. No, liberales, eso no somos nosotros. Eso tampoco está en absoluto a nuestra disposición. ¿Quién es libre hoy en día de cualquier cosa?

Ya publicamos hace más de 20 años (1976): Iatrocracia: los médicos como clase-banda-raza, desde el monopolio médico de asesinato hasta el monopolio médico de producción. Publicado desde 1977: valor, violencia y poder las hemos borrado de nuestro vocabulario y las hemos sustituido por Iatrarquía. Iatrarquía: la violencia valorativa de la norma médica. En una octavilla del Frente de Pacientes de 1979 contra un congreso internacional de médicos, con el tema de la alimentación: enfermofagia de los médicos = el canibalismo antiguo y nuevo. Escenario de la guerra y campo de batalla hoy en día: el cuerpo.

3)
La „Identidad Personal“ de los burgueses („mi vientre me pertenece a mí“) „se disuelve. Durante el enamoramiento el corazón de un ajeno palpita más fuerte. ¿De quién es ese enamoramiento? Cuando a un paciente de Parkinson se le implanta células de fetos y éste puede volver por eso a sonreír, ¿de quién es esa sonrisa, la del enfermo o la de un feto nunca nacido?“.
De este modo se pondrían fundamentalmente en duda „términos como destino o identidad o unicidad“; „erosión de los valores“, así cavila la prensa.

Nuestra Identidad-Colectiva-del-Frente-de-Pacientes no se deja cambiar de maceta, no se deja replantar, no se deja descomponer, ni revocar: identidad política (estable con respecto al espacio), identidad ideológica (estable respecto al tiempo), identidad revolucionaria (estable respecto a la eficacia y la actividad) (en nuestras expresiones alemanas: pathopraktische, diapathische, utopathische Identität).

La cabeza de un hombre, trasplantada al tronco de un simio o al revés, también codorniz a una gallina, se convierte en total y no sólo por un rato muy largo en la cabeza de la enfermedad.

La identidad nueva: el miérdico se ha ido a la mierda, enfermedad en el derecho (Arschzt im Arsch, Krankheit im Recht).

4)
Perspectivas del porvenir
El Estado pinta cada vez menos, no puede hacer nada. Lo que queda, es un conglomerado de economía y médicos. A los éticos y legisladores les parece lo del „hombre biomasa“ totalmente humano y conforme al hombre, a lo sumo pueden aún frenar un poco. Las normas de los médicos se convierten (y ya se convertían desde hace mucho) en fábricas, forman parte de las máquinas y de los métodos de fabricación, etc. Así consiguen la autoridad de lo existente.

Los pensamientos entran por la práctica en las cabezas de la gente. Si eso de los médicos se materializa y entra por la práctica, por la mano en la cabeza, a eso ya no puede un concepto como tal. Contra eso ya se necesitan colectivos del expansionismo multifocal, porque la idea, el concepto de la enfermedad, si está en varias cabezas, ya es una fuerza material, fuerza de la enfermedad.

Es decir: procurar algo sólido, algo material, hechos consumados, ahora mismo. A eso se añadirá alguna que otra cosa más y más, de por sí. Pero el principio, lo de los colectivos del expansionismo multifocal, eso no funciona de por sí. Para eso hay que decidirse, hay que moverse (Da muß man/frau sich dann schon mal einen Ruck geben. Entscheidung ist alles). La decisión es todo, no tenéis la opción: porque quien tiene la pena, éste puede y tiene que decidirse por ella, por consiguiente cada otra opción le es regalada y no sirve absolutamente para nada ni cambia nada, y mucho menos mejora algo.

La historia de los médicos va de mal en peor. Con los esclavos, el amo tenía una pérdida si aquellos se morían, hoy tendría un lucro. Los siervos de la gleba (para precisar: Leibeigene; nota de los traductores, NdT) ya vivían peor que los esclavos. Los siervos de la gleba no estaban tan caros: tenían que criar ellos mismos a sus semejantes.

Ahora sucede el gran cambio dialéctico: cada uno es totalmente valioso, esté muerto o vivo. En lo real eso es de hecho un salto cualitativo. La sociedad humana se desmonta en piezas sueltas muy valiosas, riñones, etc. Pues el hombre ya no se halla en el estado del animal, como hasta ahora, sino que se le hace retroceder hasta el estado de las plantas y los minerales.

Ya en la Edad Media cantaban „media in vita in morte sumus“ (en medio de la vida estamos en la muerte), pero hoy ya estamos un paso más adelantados, es decir en la prolongación: en medio de la muerte estamos en la vida. ¡No! no hablamos de la reanimación, tampoco de la medicina de los aparatos, sino más bien: eso ya empieza mucho antes del nacimiento (amniografía, ultrasonido, diagnosis prenatal). No hay sino nacidos muertos, no sólo desde Gretchen (Goethe, Fausto I). Artificialmente en los laboratorios o convencionalmente en el vientre, nace lo muerto saliendo hacia lo muerto. Las condiciones iatro-capitalistas en el fondo y en el efecto son montañas de cadáveres, capital muerto inorgánico, cosas-instrumentos (Dingzeugs), realidad, sí, la realidad, mundo de cosas (res, lat.: cosa, por eso el nombre realidad. Rebus (jeroglífico) ¿todavía un enigma?). Y lo que todavía se mueve, se expulsa en el acto o se aborta. Aquí ayuda solamente la enfermedad: vivid para herir, herid para vivir (lebt um zu kränken, kränkt um zu leben), sólo quien hiere está en su derecho, en una palabra: enfermedad en derecho (Krankheit im Recht) [SPK/PF(H)] 1983 siguientes, crescendo ed accelerando, forte fortissimo).

Y como estamos hablando de la Edad Media y respecto a la mentalidad de los cruzados en el SPK (Prof. Dr.Dr. Heinz Häfner, 1970, ja, ja), sí hasta mentalidad sectaria de los cruzados, sí, „sectarios“, según decían, lo hemos sido desde siempre, de esta manera han echado pestes de nosotros los nazis, de esta manera han echado pestes de nosotros la izquierda y hasta algún que otro extraviado del SPK ha tratado por aquí y por allá de analizarnos superficialmente con un „análisis de clases“, quiere decir, ha tratado de disecarnos y descomponernos. ¿Harto conocido? A este respecto lo siguiente: Al comienzo de la Edad Media se prohibió a los templarios. Quien se sometió, podía seguir viviendo en otras órdenes, organizaciones y partidos. No se habían sometido muchos. ¿Por qué? Porque éstos últimos habían encontrado algo mejor que la vida, la normalmente así llamada vida, que de todos modos no era y no es vida. Les cortaron la cabeza. ¿Qué harían estos envidiables hoy en día? Sí, en aquel entonces no existió lo de los trasplantes de órganos después, y el tener que seguir viviendo en lo ajeno, en un extraño, en la alienación potenciada. Porque hoy más que nunca: La vida viene de todos modos de una célula (Zelle, también celda) / pero desde hace mucho no termina en una tal / y de ninguna manera solamente para un así llamado granuja. (Modificación de un verso alemán: Das Leben kommt auf alle Fälle aus einer Zelle / aber enden tut es längst nicht mehr in einer solchen / und schon gar nicht mehr nur eitel und einzig bei sogenannten Strolchen; NdT.)

Quien no se declare partidario de la enfermedad, practica automáticamente la política de los médicos, es colaborador del iatronazismo, desde el crematorio del campo de concentración hasta la técnica genética, y participa en eliminarse a sí mismo (cada uno está genéticamente enfermo, nadie está genéticamente O.K., más bien K.O., véase a r r i b a), es decir, sin fin, en infinita reutilización y explotación, en un reciclaje infinito. Aquí lo tenéis, el eterno retorno de lo mismo (Nietzsche). Decid con toda franqueza y fuerza a modo de los médicos que sí (la palabra alemana: Jacker-Ja suena en alemán como un rebuzno: íah, íah; compárese también la alusión a un cuadro célebre del pintor aragonés F. de Goya, 1746-1828; NdT), vosotros que os creéis una raza superior (hombres dominadores). Pero con el aburrimiento no crece sólo el dolor, sino también la enfermedad liberadora. ¿Necesitáis realmente los extravíos y los rodeos de la genética para descubrirla? Muy cerca de la piel tenéis la enfermedad liberadora en carne y hueso, lo que es la masa hereditaria revolucionaria porque es enferma, al mismo tiempo la masa hereditaria de toda experiencia revolucionaria desde Adán y Eva hasta hoy (Bakunin manda recuerdos). ¿Por qué recorrer el mundo, si lo bueno no puede estar más cerca?

Continuáis leyendo tranquilamente de manera aplicada, estudiantes, también a vuestro Foucault: Vigilar y Castigar. Tal vez encontréis una alusión, allí nosotros no hemos encontrado nada. Y exactamente vuestro pensar popó-sitivamente, ¿para quién sirve?. Es - por vía del pompis, las apreciables posaderas - para los miérdicos y éstos son todo menos vuestras partes (sexuales) más nobles. (Es ist über den Po, den Allerwertesten, für den Arschzt, und der ist alles andere eher als Euer edelstes (Geschlechts-)Teil.)

¿Qué hay de bueno y de satisfactorio en este desarrollo?

Hasta ahora la gente ha corrido en todas las direcciones, contra el Estado, a favor de las materias primas, de un poco de felicidad con drogas, a favor de o contra los extranjeros, contra el desmontaje del Estado Social y la reducción de los puestos de trabajo, el medio ambiente, el ambiente hecho de-mente (Umwelt, Dummwelt), lo indivisible, el individuo y el átomo, indivisible, como dice ya el nombre (jaa, jaaaa). Todo eso ya no hace falta tenerlo en cuenta, de ese modo todo queda mucho más claro.
Cada uno puede tener la conciencia de ser millonario sin tan siquiera una pesetilla en el bolsillo. Pero sobre todo no puede readquirir sus órganos, sino más bien otro diseño yuppie. Quien haya ido al médico en los últimos 30 años, puede tranquilamente seguir visitándolo. Está perdido. Quien se haya acostumbrado a medicamentos y drogas, puede acelerar la marcha sin el menor escrúpulo. Todavía puede que sus órganos rindan algo en el mercado. A quien no le guste su piel, no hay problema. De la célula corporal de un extraño fallecido han germinado y nacido entre tanto pieles en masa. Se quita la propia piel y se empapela de nuevo de oreja a oreja.

Sí, querido amante de la Astrología, la clase médica ha logrado, además, un cruzamiento totalmente distinto de lo que está escrito en los periódicos alemanes con grandes ambiciones científicas, pero aún con más críticas hacia lo que tienen por los intereses secretos del pueblo, los periódicos „Stern“ o „Der Spiegel“. Desde hace mucho ha cruzado, bajo mano, la Era de Acuario, la era del ordenador, con la Era de Cáncer antes de que pudiera empezar realmente la Era de Acuario. Los esotéricos pueden echar tierra a sus controversias respecto a la pregunta de cuándo empieza la Era de Acuario. Pensad una vez en vuestras células de cáncer, mirad cómo éstas crecen y germinan, vosotros, los majestuosos seres de luz. ¿Qué es un hombre clonado? Una célula naciente y germinante y por eso una célula de cáncer, todo eso mediante electricidad. Pero en eso tiene voz también Acuario. A su servicio, señor doctor. Pero también la enfermedad puede explotar (SPK 1970/71). ¿Es abolido el cáncer por la medicina genética? Sí, seguro, también la Era de Cáncer se acabará, eso será dentro de más o menos 2.500 años. Entonces vendrán los Gemelos. Cástor y Pólux. Cástor sobre todo.
En la droguería hay silicona. Con ésta el médico te aumenta y sella los pechos (mamas y tetas, - ¡con perdón!), si lo deseas. Tampoco importa si uno está pasivo o activo, „sus“ órganos utilizables son los mismos. Sin el menor escrúpulo uno puede seguir tonto y sin ideología. Ya no hace falta hacer esfuerzos porque de todos modos cada uno está puesto y considerado como tonto al igual que la materia prima. De superpoblación no se trata, porque médicos no hay tantos, y el resto no cuenta, es material humano.

Y si uno viene con: No es tan fiero el león como lo pintan*. Es verdad, pero los médicos tienen sus propias ideas de un paraíso, ya hace mucho en los años 60 (Congreso „Man and his Future“, „El hombre y su Futuro“): A partir de ahora (1962) hasta más tarde (2000) quisieron haberlo puesto en vigor, con todos los títulos y altos cargos, ¿el qué?. El Consejo de Genética Mundial, el gobierno mundial médico, con una red de centros de vigilancia genética („asesorías“) en los gobiernos de los países, en las administraciones, en las policías locales, en las escuelas. Entonces ya no habrá guerras (¡guerras en masa de nuevo ya desde 1960!), ni subversión, ni rebelión (ja, ja, nada de eso), ya ni siquiera „resistencia contra el poder estatal“ porque los genes correspondientes estarían ya eliminados de antemano. La población mundial estaría también numéricamente bajo control hasta el año 2000, esterilizada e incapacitada para procrearse utilizando aditivos secretos en la alimentación y el agua potable. Parejas seleccionadas obtienen de vez en cuando un antídoto para los descendientes deseados, pero los correctos, los desde el punto de vista médico correctos, es decir: „Hombres como nosotros“, decía el Premio Nóbel de Medicina.

*en alemán: es wird nichts so heiß gegessen, wie es gekocht wird, literalmente traducido: 

 nada se come tan caliente como se cuece, pensar también en las manipulaciones de genes 

 con la ayuda del calor, NdT


Sí, pero también allí está justamente en medio la enfermedad, viendo qué fantasía deformada y estropeada estos criadores del hombre dominador tienen con su „utopía“. Pero de este proyecto parido muerto no ha muerto todo y no se acabó todo (en alemán: nicht alles ist schon ... gegessen (comido todo) ...; NdT). En lo que se refiere al gobierno mundial: algún que otro podría tener miedo aún posteriormente si se pudiera recordar aquellos ataques del gobierno mundial, aquellas „operaciones quirúrgicas hechas de forma precisa“. Centenares de muertos, mujeres y niños en el refugio civil antiaéreo bombardeado; pero también los comandos militares totalmente mutilados después, por el tratamiento médico anterior y no por el enemigo militar. Friendly killing, asesinar amablemente, ¿error en casos aislados? (¡!). ¿Entonces quién es el enemigo? O pensad en las „misiones humanitarias“ bajo el signo de la Cruz Roja (de sangre) en todo el mundo, todo eso siempre completamente „neutral“, „apolítico“, „puramente humanitario“, „no gubernamental“, „ayuda meramente médica“. Operando en el momento oportuno (política realista, ¡también política realista verde!): Organización Mundial de la Salud, O.N.U., „Médicos sin Fronteras“, „Medicus Mundi“ („Notärztekomitees“), etc. Con todo eso continentes enteros son escogidos para morir (auf den Sterbeetat gesetzt), la misma selección hecha por los médicos como en Auschwitz, aquí en escala masiva, Auschwitz potenciada. ¡Cómo decían: Nunca más fascismo-nazi --! nada de eso. Al mismo tiempo es una buena ocasión y un vasto campo para hacer experimentos, todo bajo la norma médica (huérfanos que nadie echará de menos, refugiados que nadie conoce). Tampoco el imperialismo es lo que era antes, sino iatro-imperialismo.

¿Quién opina: eso no me importa, está muy lejos, Tercer Mundo, etc. - ? ¡Estáis muy equivocados! Los mismos experimentos y series de ensayos con, por ejemplo, contaminación radioactiva por aviones contra la propia población en los EE.UU., con la propagación planeada de polución biológico-bacteriana en medio de Londres y en alguna que otra playa bonita, no sólo en el Mediterráneo. ¿Y qué dice el doctor/médico si los riñones, si el hígado, están hechos pedazos? „Lo malo es que todavía hay demasiado pocos donantes de órganos, si no, pudiéramos hacer con usted ...“

Estos comen comida caliente, tanto hervida como no hervida*, totalmente cool (a sangre fría), con toda la dignidad, tanto en privado como en sus oficios. Hay también caníbales bien educados. ¿Existían ya alguna vez otros? Ya Voltaire en el siglo XVIII tenía sus dudas al respecto.

* A pensar una vez más en el refrán alemán: es wird nichts so heiß gegessen, wie es 

  gekocht wird, literalmente traducido: nada se come tan caliente como se cuece, en 

  este contexto modificado: sí, ellos comen tan caliente como lo cuecen; piénsese 

  también en las manipulaciones de genes con la ayuda del calor; NdT
El campo de experimentos está al descubierto, suena un nuevo alalí, suena un nuevo grito de caza para una caza de hombres que no se puede desoír, casi invisible y en todo caso jamás visto, pues pasando desapercibido como muchas cosas para mucha gente, pero inevitable de ser oído para todos los que tienen oídos, incluso animales como los asnos (véase el cuadro ya dicho, del mencionado F. de Goya). Gen se llamó en la era nazi factor hereditario. Por eso existían las leyes de la Salud Hereditaria. Las consecuencias son harto sabidas. Ya en el siglo XIX existía esto, descubierto por Gregor Mendel, un maestro fracasado que se mutó en monje. En aquél entonces eso se llamó Caracteres Hereditarios. Rudolf Steiner, el antropósofo, en su época injuriado también de „general negro“, hoy en día atacado de racista por muchos politizados, pronosticó no por último en los años 20 el abuso de este „aparato biológico, y nada más“ para finales de este siglo y advirtió urgentemente contra ése. Por lo menos eso. Hoy en día esto se ha convertido realmente en un campo de experimentos, un vasto campo, y „Arimán“ manda recuerdos. ¿Y la Antroposofía? Devuelve los recuerdos, según el lema: Examina todo, elige lo mejor (jerga de los almacenes, venta de fin de temporada).

Lo que han hecho luego los médicos nazis son hechos consumados. El comienzo de la guerra fue después del comienzo de la guerra. Es decir, que ha comenzado con el asesinato de 275.000 pacientes debido a la enfermedad, bien preparado ya decenios antes y eso ya antes de que existiera un Hitler. El riesgo de asesinato era calculable (sí, no existe solamente un riesgo de suicidio que se puede pasar por alto; una fórmula de habla (Sprachregelung) de Leferenz/Häfner acerca de la eliminación del SPK en el año 1971, una fórmula de habla que sólo estos médicos y sus prosélitos están acostumbrados a tener por agradable). Lo que importa hoy en día, según los médicos, es no hacer las cosas a medias, y no se trata de algo en pretérito perfecto. Si se trató entonces de la selección y el exterminio de millones en Europa, se trata hoy en día de la población mundial, de miles de millones. Sí, también las cosas malas van despacio. Pero al menos por el momento los datos están almacenados.
Los que mientras tanto se llaman de nuevo nazis tenían quizá demasiada prisa. Porque la clase médica no hace examen de credo político. Examina la masa hereditaria y, en caso de duda, los genes de nadie vienen a ser como deben ser según la respectiva norma médica de salud. Ser „nazi“ no cuenta en este caso - . Nazi, conviértete lo más rápido posible en médico. ¡Si no, éste te lleva también a ti!*

* 1970/71, el SPK totalmente solo, aún completamente nuevo, tambíen contra los comandos 

  cívicos del NPD de Thadden (partido nazi) decididos a todo. Pero nosotros también 

  decididos a todo (véase „Sobre el Comenzar“). La enfermedad seguía unida y resistía 

  también contra eso. Doblemente agradable también eso, y más y más.
Sí, el mundo en su estado actual puede sugerir incluso a cerebros médicos toda clase de ideas, de modo muy idealista. ¿Tampoco éstos pueden hacer lo que quieran? Sí. Estos pueden. Y también hacen lo que les da la gana. Sí, hacen lo que quieren. Pero nosotros también. En esto seguimos siendo materialistas activos, activos contra estos „idealistas“, activos en lo grande y lo pequeño. En esto seguimos siendo incluso materialistas diapáticos, con toda nuestra masa hereditaria enferma desde Adán y Eva. Con nosotros, en nuestra compañía más cercana y también en algún que otro lugar más, se puede vivir (da stimmt die Welt schon einigermaßen). Ningún retorno de las mismas barreduras, sino barrer hacia fuera (kein Wiederkehricht, sondern Kehraus): ¡La clase médica puesta a dieta absoluta, día a día, durante 24 horas!

5)
Con respecto a las maquinaciones de la Iatrocracia, en ésas jamás interviene un jefe de Estado, ni un político, ni la policía, ni el militar. Eso es: gobierno mundial precisamente de índole médica, todo en favor del HEIL. Brindemos. ¡¡SSalud !! (GeSSundheit)

Ya en el año 1988 hemos escrito: EL MUNDO ES INGOBERNABLE YA DESDE HACE MUCHO. Quien hace un testamento contra la extracción de órganos, apuesta por que el Estado y las leyes estén en vigor y puedan conseguir algo. Pero eso depende de las vicisitudes de la economía. Es sabido que la economía es anárquica e irracional, por consiguiente siempre hace falta control. Los detalles se los reglamenta la norma médica en unión estrecha con la por principio incurable economía capitalista; la norma médica reglamenta sobre todo y no por último al Estado, al Parlamento, a la legislación, la ejecutiva, y la producción de la opinión pública, debilitados y flacos, fundamentalmente todavía más enfermizos que el complejo económico-médico en su totalidad, la iatrarquía, la iatrocracia. Por eso también tu enfermedad, querido amigo de los genes, querido camarada, querido compa(gen)ñero (Gen-osse). El Kohl* ganará, de todos modos, porque: el Kohl = la col = hortaliza, donante de órganos en potencia, que públicamente ha probado (¡post festum!) la lechuga ya en 1986 a favor de más Chernobyl.

 * (a este tiempo) jefe de Estado alemán
Nota (Huber):
Esto no está dicho en personalidades. Kohl se deduce, dice él mismo, de carbonero (Köhler). Estas son personas solitarias en el bosque sombrío. Ya en 1976 ha buscado públicamente en el Parlamento nuestra compañía, porque temió que nos hubiéramos sumergido en el maquis. De él nosotros como Pacientes de Frente decididos no necesitamos preocuparnos, como tampoco de otros millones de médicos normésicos (Normoijacker, compárese: Normesía; NdT). Pero ¡carbonizado/embromado y cosido! (verkohlt und zugenäht - una variante correspondiente de „verflixt und zugenäht“ = ¡¡maldita sea!!; NdT). Carbonizado/embromado y cosido, ése es el oficio de los médicos. Vienen y van los carbonizadores/embromadores del pueblo (Volksverkohler). Ningún contador de Geiger aún funciona correctamente. Pero los carbonizados/embromados (Verkohlten) son críticos. No caen en la trampa de los políticos. Pero votan por la norma médica y ni siquiera tienen idea de esto. Luego van al médico a por el impreso del ordenador de su masa hereditaria que, según la Genética, es enferma por definición. Entonces se dan cuenta de lo que han votado. La decisión del médico es entonces su premio gordo. ¿O el del médico? De este modo se cierra el círculo, el circuito regulador, el círculo vicioso hacia la clase médica, la única clase dominante que lo domina todo, de cabo a rabo. Kohl/col allí no es un nombre, ni persona, ni dirección, ni denominación, ni significación, sino quizá más bien un biotopo, ni siquiera un naipe, ni mucho menos un triunfo. Y su color es legión. Entonces volvamos al Biotopo como algo intermedio entre un cementerio alternativo y una fábrica genética; porque de forma diferente que en un cementerio clásico, de otra manera que en la sociedad clásica (de cementerio) tienes también tú, querido amigo de los genes (Gen-Freund), querido camarada, querido compa(gen)ñero (Gen-osse) junto con tus niños y los niños de tus niños, buenas perspectivas de seguir vegetando en un biotopo de una fábrica genética, quiere decir: lo que fue hace una eternidad una parte tuya, no carbonizada/no embromada o carbonizada/embromada (unverkohlt-verkohlt), a no ser que hagas que sobrevenga algo.
¿Testamento contra la extracción de órganos? ¿Quién lo comprueba? ¿Con cada muerto un fiscal junto a la cama? El que ha visto ya a un familiar muerto en el hospital o en una residencia, ¿le ha quitado la manta, ha lavado el cadáver él mismo o al menos ha examinado de un extremo a otro, de arriba a abajo, comprobando así el estado sin deterioro del cuerpo?. Los más ven sobresalir una cabeza de la manta. Lo que está debajo de la manta no se controla, por ejemplo, paja, serrín y papel higiénico en las cavidades corporales. ¿O está presente siempre un fiscal si se muere para reclamar el cadáver? El Estado no existe en estas zonas* normales. ¿Está bien esto o no? Para los pacientes eso viene a ser lo mismo. Lo que nos importa es absolutamente otra cosa. Al respecto, más en lo que sigue. Para compensar y descansar después de tanto husmo cadavérico. Porque también la alabanza propia, la nuestra, en materia propia, no sólo envilece sino huele, por bien fundada que esté. Pero lo que hay que hacer, hay que hacerlo.
 * véase en alemán „Grauzonen des Rechts“, zona intermedia (entre la legalidad y la 

   ilegalidad), quiere decir ejemplarmente: establecimientos sanitarios; NdT
FUERA CON LA CLASE MEDICA; ESTO ES EN ESTE CASO EL PROBLEMA PARCIAL QUE HAY QUE RESOLVER.
(¿El aislado - y cada uno lo es - no puede hacer nada, no les puede impedir que continúen, no puede acabar con las fechorías de los médicos? Nada más falso.

La tercera parte de la población de todos modos nunca va al médico. ¿Creéis que están bien - - „de salud“?, en plena posesión de la felicidad de la vida, se llama esto, según la Organización Mundial de la Salud).

¡LA SOCIEDAD SIN CLASES ES LA META. QUE VENGA LA CLASE DE LOS PACIENTES!

Nadie sino nosotros, el SPK/EMF (expansionismo multifocal), trabaja sobre este problema, nadie sino el SPK/EMF tiene soluciones para esto.

En nuestra compañía más cercana, entre nosotros, por ejemplo riesgos de diálisis y trasplantes de corazón simplemente no los hay. También sin diagnosis genética cada uno sabe de sí mismo y del otro, cuándo y si le sobreviene un golpe en la cabeza, el corazón o los riñones (insulto, infarto, apoplejía). Pero sobre todo: dicho y hecho. Hay amortiguadores contra todo golpe (iatrocidios). Entonces el golpe se dirige a otra parte. En eso no rehusamos (ausschlagen) y no negamos nada a nadie, pero siempre con un objetivo muy determinado. Ha llegado Mayo, hasta la última de todas las hortalizas, hasta el árbol, también el árbol alemán podía dispararse y crecer rápidamente desde siempre y todas las veces, (véase el refrán alemán: Der Mai ist gekommen / die Bäume schlagen aus; Mayo ha llegado / los arboles brotan; NdT), siempre que fuéramos hortalizas para los médicos. En el porvenir cada uno puede ir a diálisis, al trasplantador de corazón y al de las cabezas, al „jardinero“, para ser injertado, hortalizas, hortalizas. En nuestra sociedad más cercana nos están impuestos límites estrechos. La sociedad vieja necesita la ilusión de la libertad, es decir, de comprar y de vender lo que cada uno quiera, organismos descomponibles desde siempre, por ejemplo así llamados hombres. Esto es la libertad y no solamente la ilusión de ella. Entonces: diálisis, trasplantes de órganos, etc.: Cada animalito con su tema, cada niño con su globo (Jedem Tierchen sein Pläsierchen, jedem Kind sein Luftballon).

Debían al menos tener vergüenza quienes insisten en „su“ super“viven“cia y en cambio hacen descuartizar y degollar a otros. Se debería haber insistido ya mucho antes y aún con más decisión totalmente en otra cosa, es decir en una sociedad en la cual tales cuestiones no puedan surgir del todo, en la cual tales „casos límites“, tales problemas de las minorías de ningún modo existan. Nosotros por nuestra parte sabemos de lo que hablamos, porque ya más de una vez éramos nosotros los „casos límites“, éramos nosotros los de „escaso valor“. ¿Donde estuvieron en aquel entonces los predicadores que habían intervenido a favor nuestro? Estuvieron en Heidelberg y en Stuttgart. Se llamaban rector y teólogo Rendtorff y ministro de cultura y teólogo Hahn. ¿Y qué habían predicado entonces? „¡Hay que acabar con esta mala hierba! ¡Eliminación con todos los medios estatales!“. - Bueno, mientras tanto el canibalismo y el robo de cadáveres (Leichenfledderei) (donación de órganos) son una tarea irrenunciable de la caridad cristiana, ha predicado últimamente el cura Brinkmann en la tele. Y eso fue lo único que había olvidado, según sus propias palabras (¡!), es decir de rellenar en su escritorio el impreso para la donación de órganos.

Nos hemos deshecho de los médicos entre nosotros, en nuestras compañías y sociedades más cercanas, desarrollándose de diferentes maneras, pero partiendo de los mismos principios, sociedad de todos modos, hasta sociedad buena porque está hecha por nosotros mismos, ni familia „grande“ ni „pequeña“, para nada familia, libre de médicos, arrostrando la „alta“ sociedad que sigue existiendo. Hacemos esto desde hace más de 30 años, a saber, libres de médicos, y sin médicos, pese a quien pese y en las condiciones más distintas, en la clínica, en los locales del SPK que habíamos conseguido luchando, en la trena y durante la persecución, en el bufete y en el tribunal, en KRANKHEIT IM RECHT (ENFERMEDAD EN SU DERECHO). Con absoluta hostilidad a la terapia, luchamos también en el Parlamento Europeo, en la O.N.U. y en el Consejo Ecuménico de las Iglesias, en Stuttgart y Bonn, tanto en los tiempos del así llamado tedio hacia la política como en los de la llamada revuelta, y a pesar de ella. Todos esos proyectos, mejor dicho: aquellos „puntos de partida“ y „estrategias“ grandilocuentes han desaparecido, algunas personas desde estos pasados „grupos“ tienen entretanto que, al menos, fingir arrepentimiento ante los jóvenes por haber combatido al SPK, entonces viviendo por ejemplo en Heidelberg, Heidelberg sólo un ejemplo.

El blanco del ataque de los médicos es el cuerpo aislado. Eso no sucede con nosotros. Pero al revés sí. ¿A dónde dejar el cadáver? Vuestras vueltas (Touring) no serán suficientes en este caso. Nosotros sabemos dónde están seguros nuestros órganos, también como partes cadavéricas. No vendemos partes cadavéricas de los médicos. En principio y en suma, estamos en contra de todo comprar y vender. Pero debido al iatro-capitalismo ya existente, en la sociedad nueva tampoco se funciona aún totalmente sin compromisos. El muro caerá.

En el año 1987 hemos presagiado públicamente que en el verano de 1989 tendría lugar un estallido de repercusión mundial. Había que disponer lo necesario. En 1989 estalló la RDA y, por ahora también, todo el capitalismo llamado „subdesarrollado“ del bloque oriental.

En las partes más despiertas de la prensa extranjera dicen sobre el SPK/PF(H):

En los EE.UU. dicen sobre nosotros: El SPK/PF(H) ha demostrado cómo es posible existir durante decenios sin tener que ocuparse de „problemas“ como SIDA, alergia, gripe, cáncer, fracturas de pierna, y semejantes casos, porque todas éstas son formas de la enfermedad, a las que uno puede y tiene que oponerse eficazmente de antemano cambiando al menos la realidad, incluso la realidad en que los activistas del SPK/PF(H) existen, sólo fuera y en contra de toda medicina y sus normas en vigor, y sin medicina y terapia. Los resultados del SPK/PF(H) son capaces de proveer una base sólida también para todos los otros movimientos de resistencia, porque no hay movimiento que esté más o menos completo fuera de la enfermedad, ni mucho menos puede reivindicar credibilidad y autenticidad si este fundamento y su elaboración teórica no es lo principal, por antirracista, anticapitalista o antipatriarcal (feminista) que este movimiento se considere y llame.

Incluso publicaciones hostiles a nosotros (Archivo de Ginebra para Procesos Políticos) han certificado al SPK „curaciones milagrosas“.

„No es de extrañar“, dicen otros sobre nosotros, „que éstos logren hacer tantas cosas, son al menos un millar de gente en una cuidad“, y éstos otros nos conocen solamente a través de nuestras actividades y publicaciones sin tener jamás contacto personal.

El radio de extensión de las publicaciones del SPK/PF(H) alcanza mientras tanto a millones. Comentario durante un festival de masas en Berlín: „He visitado aquí varias comunas. Pero en todas partes hay por lo menos un libro vuestro sobre la mesa“.

Sólo el saber eficaz sobre la enfermedad y el salir bien de la utopatía (véase abajo) es el criterio para lo „correcto“ y lo „falso“ en lo antes así llamado político.

La enfermedad era desde hace siempre el núcleo de todo cambio revolucionario, aún cuando hubieran luchado aparentemente por „tierra“, „pan“ „paz“ y „libertad“. Pero hoy a través del SPK/PF(H), por vez primera la enfermedad está significada expresamente de forma revolucionaria.

Lo subjetivo revolucionario eran desde hace siempre y en todos los tiempos las enfermedades, las formas de protesta suprimidas como enfermedades por los médicos y los gobernantes correspondientes, las enfermedades en el camino y con la determinación de ser enfermedad, la especie enfermedad, la especie humana, la humanidad en su diversidad y su simplicidad/unidad (Einfalt) como especie humana, o mejor dicho, de modo dúplice y nunca simple, enfermedades y enfermedad en proceso dialéctico, posible y real sólo en un mundo de la utopatía sin médico y sin terapia, un mundo de la utopatía, que no es utopía, porque es realizable y eficaz, como se ha demostrado.

El fundamento de todo lo demás es hoy en día la alianza entre médico y economía (todo gira alrededor de la explotación de la enfermedad, el complejo médico industrial es el negocio más grande). El Estado es en este contexto más bien algo accesorio, bajo la clase dominante de los médicos, pues bajo la clase dominante para todos, no sólo para los que están enfermos según los médicos. Pero también el Estado existe todavía, siempre al servicio de los médicos al principio y al final, igual que la policía y el militar, como maquinaria de asesinato y con el objetivo de „un sistema de alarma temprana“, hay que darles la debida importancia. Pero todo esto bajo el mando de lo médico, bajo el dictado de la NORMESÍA (la burguesía antigua, como aún en los tiempos de Marx, ya está pasada).

En cambio el sujeto revolucionario es inextirpable e incorruptible y era ya desde hace siempre lo que es hoy y será en el futuro más que nunca, es decir: la enfermedad bajo la determinación paciente, a saber, cuando la clase de los Pacientes de Frente se enfrenta con la clase dominante de los médicos, los primeros no como organización y asociación, sino en la actividad encauzada y concentrada del expansionismo multifocal (EMF, en alemán: MFE), nosotros llamamos a esto también cuerpo de calor, el que existe y ya ha existido como Colectivo Socialista de Pacientes, el que existía desde hace siempre como la causa real y el principio dinámico de todos los orígenes revolucionarios conscientemente hechos, si fueran realmente tales sin importar cómo se consideraron a sí mismos, sin importar cómo fueron etiquetados, sin importar qué otras etiquetas asumieron, desde los llamados espartaquistas de la antigüedad hasta los consejos y soviets (Räte) y los sansculottes de los tiempos más modernos.

También la revolución ha cambiado de cara. No es que la revolución nueva en virtud de la enfermedad salte a la vista de algún que otro (nicht gerade in die Augen stechen), tampoco es muy cautivador (bestechend) que ésa se manifieste sin alarido y sin mucho bombo, sin víctimas y sin mártires, sin héroes. Ni siquiera se plantea la cuestión: sigue algo mejor después. Todo eso ya es pretérito perfecto entre nosotros, no: futuro plus-cuam-perfecto. Hace falta una transformación fundamental, sin duda alguna. No solamente para todo comienzo nuevo correspondiente. De ningún modo eso ocurre sin dolor. Los hábitos viejos se quebrantan por sí mismos bajo la enfermedad. No da lástima de ninguno. Es decir: ninguna imposición consumista, ninguna imposición para tomar drogas.

„Pero vosotros os lo tomáis demasiado a la ligera, mientras que nosotros trabajamos políticamente en tooodos los terrenos en un amplio espectro“. Tan sólo tras algunas semanas, después de algunos meses, como cada año de nuevo, tal vez acá y allá una „acción“, y el resto del tiempo en plena colaboración, en pleno jaleo, en plena juerga y cargados y colocados (voll, voll, voll und zu). ¿Qué se va a conseguir con eso?, preguntamos. Nada contra una acampada reivindicativa (Wehrdörfer), nada contra bloqueos, nada contra los que están agotándose en eso y luego serán entregados como presa a los médicos y más que nunca como aislados, y muchas veces por sus propios compañeros para los que han llegado a ser una carga. Es verdad, en todos los terrenos, antibiótico de amplio espectro, pero todo eso es menos que nada, es más perjudicial.

Las formas antiguas de ataque han de ser examinadas de nuevo con respecto a su aptitud, esa aptitud quizás ya no existente en la multitud de los casos reales y específicos. No funcionará sin inventos, pero sin protección de patentes. Hemos introducido durante los años muchos inventos, es decir, que apenas había y hay que descubrir o que desenmascarar algo. Sabemos manejar todo ya con mucha antelación. Ya hace decenios que hemos agarrado la ocasión, lo hemos profundizado, nos hemos hecho una idea, lo hemos transformado y llevado a la práctica, y esto con estabilidad con respecto a la eficacia (wirkstabil). Sobre eso existen todavía hoy los libros, nuestro aseguramiento de las huellas.

El problema con la operación, el problema: „¿Qué hacéis-vosotros-cuando-uno-se-ha-fracturado-la-pierna?“, solucionadlo mediante control por parte de los pacientes, el resto mediante iatrocidios (fuerza potenciada, más bien: pat-enciada, es decir, fuerza de la enfermedad; pathenzierte Kraft, d. h. Kraft aus der Krankheit). Y cosas como las prótesis, si las hay, utilizadlas como muletas contra los médicos, en caso de que os parezca que todo es demasiado tarde ya (muletas: pastillas, jeringuillas, marcapasos, caderas artificiales, gafas, en pocas palabras, es decir: también en estos casos patopráctica en vez de y con prótesis.)

¿Habéis formado ya EMFs, focos del Expansionismo Multifocal, grupos pequeños? La unidad de la diversidad (Vielheitseinheit) es el único problema real y la única solución. Que venga la realidad libre de médicos (arztfreie Wirklichkeit).

Llevar siempre la ventaja al adversario, tener preparado lo necesario ya de antemano (en alemán: ap-parat statt Apparat; literalmente: estar pre-parado en lugar del aparato). ¡Inventa, deja correr la imaginación!

 NTD (negación total de declarar) (TAV, Totale Aussage Verweigerung): ¡Ninguna información a los médicos y a los ayudantes de los médicos - tampoco a sus ayudantes en el Estado y en la sociedad - sobre vuestras enfermedades! Es decir: ¡Ninguna información de todo! ¡Ninguna firma, ningún peritaje! ¡Quédese a tres metros de distancia, señor colega, si no habrá palos! Esta es nuestra divisa desde los primeros tiempos de Huber en los años 70.

¡Ataque a los husmeadores en avanzadilla y proveedores de los médicos [casas de acogida, alianza protectora de pacientes, grupos de autoayuda (¡médico, ayúdate a ti mismo!)]!

En el caso de contacto forzoso con los médicos: ¡Control por parte de los pacientes! ¡Que esté presente siempre un defensor de la enfermedad (Beistand im Krankheitswesen)! ¡Presentar querella siempre! ¡Presentar una reclamación a la autoridad competente! ¡Forzar a los Colegios Médicos a declarar!

El centro de ataque es siempre lo médico, lo médico también en lo militar, también en la policía, por ejemplo el médico policía [el ejemplo del Vietcong, véase: Iatrokratie im Weltmaßstab, SPK-Dokumentation Teil IV (Iatrocracia a escala mundial, Documentación del SPK, tomo IV)].

¿Habéis encontrado y preparado ya al menos unas posibilidades de retirada? Algunas veces estáis dando vueltas (Touring). Pero eso dicta la agencia de viajes. Quiere decir: procurar posibilidades para moverse apartadas de los caminos gregarios del turismo.

¡Empezad! ¡Haced frente vosotros mismos, Frente de Pacientes! ¡Haced algo para vosotros mismos! Enfrentad por fin la clase de los pacientes a la clase de los médicos existente ya desde hace mucho, en lugar de seguir siendo el depósito vegetal y el almacén de órganos de la clase médica, porque como tal ésta os ha definido, y precisamente en la practica (in praxi). Cread muchos paraísos del Frente de Pacientes libres de médicos. El infierno ya os es regalado en vuestros paraísos existentes. ¿O todavía no es lo suficiente paradisíacamente caliente para vosotros? Se puede morir de hambre, también de bulimia en la Jauja de la Edad de Piedra capitalista, ¿ya lo habéis notado?.

Si a algún que otro esta revolución le parece demasiado fácil, no le gusta, le parece incompatible con su dignidad, incompatible con su sangre fría (coolness) (también la dignidad de tal cual es inviolable, por lo menos „la dignidad“, compárese la Constitución Española), entonces puede estar seguro de que no existe una revolución más profunda y más irreformista. Quien prefiera montañas de cadáveres y otras luchas técnicas, puede mirar la tele o jugar con su PC, seguro de su valor de varios millones, órgano a órgano, célula a célula, gen a gen, tanto recibidos como donados, tanto dados como extraídos.

Es decir, que para el 1o de Mayo apelamos de nuevo a nosotros y a nuestros semejantes, es decir, esta vez a casi todos.

En caso de que ya sólo esto le haga perder a alguien el habla incluso la así llamada energía (correcto: fuerza de la enfermedad), la sensibilidad moderna con y sin terapia-por-entrenamiento-sensorial (sensitivity training), si uno está afectado, incluso herido (¿ojalá por lo menos herido completamente en su punto?) (en alemán: gar gekränkt, hoffentlich wenigstens gargekränkt?, NdT), una forma de defensa que no se defiende en absoluto, ni mucho menos evita nada y no imposibilita nada, entonces a éste no se puede ayudar después tampoco con lemas, en forma de consignas, sea quien sea el que las pronuncie.

SPK/PF(H): Colectivo Socialista de Pacientes (SPK)/ Frente de Pacientes (PF), 1998/97
 
 

Epílogo

El bautismo de fuego está acabado
sea el 9 siempre loado

Que no se preocupe el pueblo y los que se dan cita aquí por nuestra osadía.
Ya han hablado los ordenadores supremos. De sus contenidos un representante del gobierno de los EE.UU. sacó la conclusión siguiente:
El SPK no sirve para ningún terrorismo. Todo lo contrario, constituye un ejemplo ideal para un cambio revolucionario auténtico, jamás visto en el pasado... . Todo el que ataque al SPK, por eso automáticamente es un nazi.
Así pues han alcanzado sus límites al menos todas las autoridades estatales solamente por su confrontación con la fuerza de la enfermedad.

Ocasión y detalles:
El 8 de Abril de 1997 un joven Paciente de Frente (30), desde hace decenios físicamente impedido de gravedad (no desde su propio punto de vista pero sólo por la evaluación de los médicos), distribuyó este manifiesto en la capital de un país europeo de habla alemana. Un servicio secreto militar le tomó como rehén interrogándole en un departamento de un cuartel militar (Militärkaserne!) durante dos horas. Bofetadas, pero ninguna tortura especial, prescindiendo de las amenazas con un asesinato secreto (p.e. „accidente de tráfico“) como es usual en tales ocasiones. “¿De dónde proceden los secretos, publicados en este papel? ¿En qué servicio secreto está o estuvo empleado el autor? ¿Qué quiere decir: fuerza de la enfermedad? ¿Dónde vive? ¿Qué hace además? ¿A quiénes ayuda la fuerza de la enfermedad?“
El Paciente de Frente por supuesto no hizo más que callarse, demostrando su desprecio profundo, sabiendo de muchas experiencias que estaba en todas las situaciones más cerca de la vida que de la muerte, gracias a la enfermedad universal que tienen todos en común, extrañándose sobre esos enanos practicando bodybuilding con su querer y su saber, su terrorismo médico, adictos a su analfabetismo liter-ario-mente total. Por lo demás, desde hace decenios cada uno puede procurarse las respuestas sobre los mencionados secretos sin pertenecer a algún servicio secreto, así pues sin imitar el juego policial de la CIA. Así pues se trató solamente de pretextos pretendidos, quizás para que ocultaran sus irracionalismos, es decir sus propios miedos secretos. Así pues enfermedad reaccionaria dependiente de la dictadura internalizada proveniendo al fin y al cabo de la clase de los médicos (arquiatría), y nada más.
Luego el Paciente de Frente comunicó el asunto a sus amigos y no sólo él continua comunicándolo. Resultado: véase arriba las líneas 1-8 de esta página. Pues bien: incluso la juventud, a veces sufriendo demasiado del aburrimiento en una sociedad atomizada y exuberante de mercancías, puede precipitarse serenamente en la aventura de la enfermedad.
No sentimos que todas las autoridades y los ordenadores, incluso los españoles, sean obsoletos.

Nota bene:
Los médicos no sirven para nada,
excepto para el terrorismo terapéutico.
¿No se vende cada terrorismo y contra-terrorismo por remedio,
así pues por terapia universal? ¿Terapia para quiénes?
Ciertamente no para los que prefieren patopracticar el dolor en vez de sacar tajada de y de sacrificar al Moloc valor.
Pero la enfermedad, menos mal, ya ocupa todos los sitios.
¡Abajo el iatro-capitalismo!
¡Enfermedades uníos!










¿Bautismo o prueba de fuego? Verdad, en el caso del mencionado genocidio genético ya no falta agua para extinguir el fuego letal, este fuego crónico, pero letal.